Realmente cuando termina un curso siempre me queda una sensación
de nostalgia y de incertidumbre. Nostalgia por perder a todas esas personas con
nombre y apellidos, con problemas y alegrías que comenzaron el curso como
alumnos y lo han finalizado como compañeros míos. Incertidumbre por lo que el
futuro les deparara y si habré sido capaz de llenar esas carencias que tenían de
tal forma que les sirva para encontrar un trabajo digno.
Hoy termina este curso en Maristak Durango. Mis compañeros
me han regalado un proyecto que me ha llenado de alegría, le han dado vuelta a
una práctica de clase para hacer de ella un sistema que permita aumentar la
seguridad vial. Espero que ese espíritu de superación y lo que les he podido
trasmitir les ayude en su espero que pronta incorporación al mercado laboral.
Sinceramente muchas gracias COMPAÑEROS.
Igor,
Ahmed, Iban, Miguel Ángel, Aitor, Carlos, Mohammed, Iban Vidal, Alberto Ibrahim, Montassir y Gorka
Y ya os dejo con el proyecto que he comentado.